se ha determinado que las partículas que producen la combustión del diésel se incluyan en el mismo grupo que cancerígenos como el amianto, el plutonio, la luz solar y el alcohol.
El posible vínculo entre el uso de teléfonos móviles y el cáncer de cerebro podría parecerse a la relación entre el tabaco y el cáncer de pulmón, que la industria tabacalera y la sociedad tardaron 50 años en reconocer